Materiales para Cocina Exterior
¿Qué materiales elegir para tu cocina exterior?
A la hora de diseñar tu cocina al aire libre, la elección de materiales para cocina exterior es un factor fundamental para que disfrutes al máximo de tu jardín o terraza.
Las cocinas de exterior se pueden fabricar con cemento, madera, acero inoxidable AISI 304 o 316, mármol o porcelánico, entre otros. Descubre aquí los mejores consejos de nuestros expertos ingenieros y diseñadores sobre materiales para cocina exterior.
Tabla de Contenidos
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Materiales para Exterior
No Recomendados
A continuación te presentamos una serie de materiales para cocina exterior que, según nuestra experiencia, no son los más adecuados : mármol, Silestone, Compac, hormigón, microcemento, madera, acero corten, aluminio.
Todos ellos son poco duraderos cuando se colocan en espacios exteriores al no ser resistentes a los fenómenos atmosféricos como sol, rayos UV, niebla salina, frío o calor y no siempre cumplen todos los requisitos fitosanitarios.
Recomendados
Te aconsejamos optar por el acero inoxidable AISI 304 y el acero inoxidable AISI 316 para disfrutar de una cocina de exterior moderna resistente y duradera.
Si prefieres un acabado efecto mármol o piedra natural, te recomendamos los porcelánicos o granitos de gran formato. Imitan a la perfección el acabado exterior de distintos tipos de mármol, pero son mucho más resistentes y durables en el tiempo.
Materiales Inadecuados
Silestone o Compac son compuestos de resina por lo que ofrecen poca resistencia a la temperatura. Si colocas una sartén o recipiente caliente sobre este tipo de material, estos materiales se queman y son muy difíciles de reparar. También son muy permeables, por lo que se manchan fácilmente, como ocurre con el mármol.
Además, uno de los componentes del mármol es el carbonato cálcico, que lo vuelve muy sensible al contacto con alimentos ácidos como el vino, el vinagre, la Coca-Cola, etc. Las encimeras de hormigón o microcemento son también muy porosas y frágiles, por lo que se rayan y se manchan con mucha facilidad.
Tendrán buen aspecto los primeros días, pero se degradarán rápidamente tal y como ocurre con la madera, que independiente del tipo que elijas, se verá muy afectada por los rayos UV. Para conservarla deberás hacerle un mantenimiento aproximadamente cada 6 meses.
Por último, no recomendamos el aluminio, que es un material utilizado en mobiliario de exterior ya que pesa poco, pero se raya con mucha facilidad y no ofrece una resistencia estructural.
Silestone o Compac son compuestos de resina por lo que ofrecen poca resistencia a la temperatura. Si colocas una sartén o recipiente caliente sobre este tipo de material, estos materiales se queman y son muy difíciles de reparar. También son muy permeables, por lo que se manchan fácilmente, como ocurre con el mármol.
Además, uno de los componentes del mármol es el carbonato cálcico, que lo vuelve muy sensible al contacto con alimentos ácidos como el vino, el vinagre, la Coca-Cola, etc. Las encimeras de hormigón o microcemento son también muy porosas y frágiles, por lo que se rayan y se manchan con mucha facilidad.
Tendrán buen aspecto los primeros días, pero se degradarán rápidamente tal y como ocurre con la madera, que independiente del tipo que elijas, se verá muy afectada por los rayos UV. Para conservarla deberás hacerle un mantenimiento aproximadamente cada 6 meses.
Por último, no recomendamos el aluminio, que es un material utilizado en mobiliario de exterior ya que pesa poco, pero se raya con mucha facilidad y no ofrece una resistencia estructural.
¿El cemento y la madera son materiales adecuados?
Cemento
No se recomienda el uso de cemento en cocinas exteriores debido a varios factores. En primer lugar, su porosidad natural lo hace vulnerable a la absorción de humedad, lo que puede provocar grietas y astillas, especialmente en un ambiente exterior expuesto a las inclemencias meteorológicas. Igualmente, el cemento suele reaccionar mal a los cambios de temperatura, lo que puede comprometer su durabilidad en el tiempo, especialmente con los ciclos de hielo y deshielo.
Además, el cemento es propenso a mancharse, especialmente por sustancias como el aceite, la grasa y los jugos. En una cocina al aire libre es fácil que se vierta comida, lo que dificulta la limpieza y deja manchas permanentes en el cemento. El desgaste por el uso frecuente también es un gran problema, que hace que este material requiera un mantenimiento regular, para evitar la entrada de humedad y otros elementos.
Madera
Si bien la madera es cálida y agradable, presenta desafíos en las cocinas de exterior debido a sus propiedades naturales. En primer lugar, la madera es sensible a la humedad, por lo que en un ambiente exterior expuesto a la lluvia, a la nieve y al rocío, tiende a hincharse, deformarse o incluso pudrirse con el tiempo.
Por otro lado, su vulnerabilidad a los insectos, como las termitas, puede afectar a su estructura, requiriendo por lo tanto un cuidado especial. La madera también está sujeta a la descomposición debido a las inclemencias meteorológicas, incluidos los rayos ultravioleta, la lluvia y el hielo, entre otros.
Esta degradación puede provocar envejecimiento prematuro, decoloración y formación de grietas. Además, la madera requiere un mantenimiento regular, como la aplicación regular de barnices y/o aceites protectores, para preservarla de los elementos externos.
Mármol o porcelánico:
¿Cuál es la diferencia?
Mármol o porcelánico: ¿Cuál es la diferencia?
Composición Química
Entre la elegancia atemporal del mármol y la versatilidad y modernidad que te ofrece el porcelánico se presenta una elección crucial. A continuación descubrirás cuáles son las similitudes y diferencias entre ambos materiales para cocina exterior.
El mármol es un material muy estético, pero no se recomienda su uso en encimeras de cocina exterior al ser muy poroso.
El mármol está compuesto por carbonato cálcico y por lo tanto reacciona desfavorablemente a los alimentos ácidos como el limón, la Coca-Cola, el vino, el vinagre, el tomate, etc. Además, al ser poroso absorbe todos estos elementos y una vez teñido no es posible quitar la mancha, ya que los alimentos ácidos penetran en el material.
Entre la elegancia atemporal del mármol y la versatilidad y modernidad que te ofrece el porcelánico se presenta una elección crucial. A continuación descubrirás cuáles son las similitudes y diferencias entre ambos materiales para cocina exterior.
El mármol es un material muy estético, pero no se recomienda su uso en encimeras de cocina exterior al ser muy poroso. El mármol está compuesto por carbonato cálcico y por lo tanto reacciona desfavorablemente a los alimentos ácidos como el limón, la Coca-Cola, el vino, el vinagre, el tomate, etc. Además, al ser poroso absorbe todos estos elementos y una vez teñido no es posible quitar la mancha, ya que los alimentos ácidos penetran en el material.x
Manchas y Rayaduras
En ocasiones, el mármol recibe un tratamiento antimanchas, que no es más que una capa que recubre la superficie e intenta tapar el poro. Sin embargo, dependiendo de la frecuencia de limpieza y de los productos utilizados, la duración y la eficacia de este tratamiento pueden reducirse considerablemente, por lo que el riesgo de que aparezcan manchas permanentes sin posibilidad de reparación es elevado.
El mármol es una roca metamórfica que se genera en el interior de la tierra debido a altas presiones, de manera que los materiales se encuentran en forma líquida y al unirse forman estas betas curvas visibles en el material. Una beta indica la unión de dos materiales diferentes y es un punto frágil, ya que cada material tiene un punto de resistencia diferente. Por este motivo, el mármol se raya y se rompe con facilidad, especialmente en la zona de la beta.
En ocasiones, el mármol recibe un tratamiento antimanchas, que no es más que una capa que recubre la superficie e intenta tapar el poro. Sin embargo, dependiendo de la frecuencia de limpieza y de los productos utilizados, la duración y la eficacia de este tratamiento pueden reducirse considerablemente, por lo que el riesgo de que aparezcan manchas permanentes sin posibilidad de reparación es elevado.
El mármol es una roca metamórfica que se genera en el interior de la tierra debido a altas presiones, de manera que los materiales se encuentran en forma líquida y al unirse forman estas betas curvas visibles en el material. Una beta indica la unión de dos materiales diferentes y es un punto frágil, ya que cada material tiene un punto de resistencia diferente. Por este motivo, el mármol se raya y se rompe con facilidad, especialmente en la zona de la beta.
Durabilidad
El porcelánico supera al mármol en muchos aspectos. Su impresionante durabilidad lo hace ideal para espacios de uso frecuente, a diferencia del mármol, que es muy susceptible a manchas y rayaduras. La infinita variedad de estilos, colores y acabados del porcelánico te ofrecen una flexibilidad estética superior a la del mármol. Además, su mantenimiento es muy fácil y poco exigente, a diferencia de las más que exigentes precauciones necesarias para preservar el aspecto del mármol.
Por último, el porcelánico es mucho más respetuoso con el medio ambiente, al estar fabricado a partir de materiales reciclados y requerir menos energía para su producción. En definitiva, el porcelánico se presenta como la alternativa más práctica, estética y ecológica y supera al mármol en todos estos aspectos.
El porcelánico supera al mármol en muchos aspectos. Su impresionante durabilidad lo hace ideal para espacios de uso frecuente, a diferencia del mármol, que es muy susceptible a manchas y rayaduras. La infinita variedad de estilos, colores y acabados del porcelánico te ofrecen una flexibilidad estética superior a la del mármol. Además, su mantenimiento es muy fácil y poco exigente, a diferencia de las más que exigentes precauciones necesarias para preservar el aspecto del mármol.
Por último, el porcelánico es mucho más respetuoso con el medio ambiente, al estar fabricado a partir de materiales reciclados y requerir menos energía para su producción. En definitiva, el porcelánico se presenta como la alternativa más práctica, estética y ecológica y supera al mármol en todos estos aspectos.
Los Mejores Materiales para Exteriores
Acero Inoxidable 316
Los mejores materiales para cocina exterior son sin duda el acero inoxidable marino AISI 316. Resistirá a todas las condiciones climáticas y mantendrá siempre un aspecto perfecto. Es muy fácil de limpiar, cumple con las normas fitosanitarias y tiene una gran resistencia estructural.
El acero inoxidable 316 y 304 son sin duda los materiales para cocina exterior de gama más alta. El acero inox AISI 316 es muy resistente a la niebla salina y se utiliza en la fabricación de barandillas de piscinas, muchos elementos de los yates de lujo, así como de los exclusivos relojes de marcas como Hublot o Rolex.
Acero Inoxidable 304
Entre las opciones de acero inoxidable disponibles en el mercado, el acero inoxidable 304 es la opción recomendada para quienes buscan los beneficios del acero inoxidable a un precio más accesible.
Este material comparte casi todas las mejores cualidades de la variante 316, con la única diferencia de que es ligeramente más susceptible al deterioro en ambientes salinos. En conclusión, si no vives cerca del mar, este material es una elección muy recomendable.
Porcelánico
Si te gusta la estética del mármol pero quieres evitar su mantenimiento y fragilidad, te aconsejamos optar por el porcelánico. Se trata de placas de gran formato cortadas mediante máquinas de control digital de alta precisión.
Este material se caracteriza por una robustez única en el exterior y no es poroso tal y como ocurre con el mármol. Además, el porcelánico no absorbe los ácidos, por lo que es prácticamente imposible que se manche, y por lo tanto, te ofrece una mayor resistencia y durabilidad.
¿Cómo proteger tu cocina exterior?
La mejor protección para tu cocina radica en elegir los materiales para cocina exterior más adecuados. Los materiales más resistentes y duraderos, como el acero inoxidable 304 y 316 y el porcelánico, un diseño adecuado y un mantenimiento periódico brindarán la mayor durabilidad a tu cocina exterior para que pueda resistir a las inclemencias meteorológicas y ser funcional durante todo el año.
Igualmente, existen diferentes posibilidades de protección adicional para tu cocina exterior: entre la majestuosidad de una pérgola y la funcionalidad de los toldos protectores surge una elección crucial para tu jardín o terraza. Descubre aquí cómo ambas opciones te ofrecen enfoques distintos para proteger y transformar el espacio donde ubicarás tu cocina de exterior.
La mejor protección para tu cocina radica en elegir los materiales para cocina exterior más adecuados. Los materiales más resistentes y duraderos, como el acero inoxidable 304 y 316 y el porcelánico, un diseño adecuado y un mantenimiento periódico brindarán la mayor durabilidad a tu cocina exterior para que pueda resistir a las inclemencias meteorológicas y ser funcional durante todo el año.
Igualmente, existen diferentes posibilidades de protección adicional para tu cocina exterior: entre la majestuosidad de una pérgola y la funcionalidad de los toldos protectores surge una elección crucial para tu jardín o terraza. Descubre aquí cómo ambas opciones te ofrecen enfoques distintos para proteger y transformar el espacio donde ubicarás tu cocina de exterior.
Toldo o Pérgola
Coloca tu cocina exterior bajo un toldo o pérgola realizados con materiales resistentes y duraderos para mayor protección de tu cocina de exterior. Es importante que estos elementos proporcionen la protección adecuada contra la lluvia, el viento y el sol.
Las pérgolas y los toldos te ofrecen una versatilidad excepcional. Además de brindar protección contra las inclemencias meteorológicas, realzan la estética de tu espacio exterior, creando un lugar atractivo donde disfrutar. Su versatilidad te permite crear un espacio para diferentes actividades, desde cenas al aire libre con los tuyos hasta relajarte.
Además de agregar valor a tu hogar, regulan la temperatura, y te brindan frescor y confort en los días más calurosos. Por lo tanto, estas estructuras son elementos funcionales y estéticos a tener en cuenta en cualquier jardín o terraza.
Fundas de Protección
Para proteger eficazmente su cocina exterior, te aconsejamos utilizar fundas diseñadas específicamente para uso en exteriores, fabricadas con materiales resistentes e impermeables, como poliéster recubierto de PVC, vinilo o lona impermeable.
Asegúrate de que la funda queda ajustada para evitar la infiltración de agua, polvo y suciedad. Al mismo tiempo, es importante que la funda proporcione una ventilación adecuada para evitar la condensación.
Opta por cierres seguros, como cremalleras o cordones, para asegurarte de que la funda esté siempre bien colocada, incluso en los días más ventosos. Limpia tu funda periódicamente y guárdala adecuadamente para prolongar su vida útil y mantener su eficacia a la hora de proteger tu cocina exterior de las inclemencias del tiempo y de la suciedad.
Mejores Materiales para Cocina Exterior
Nuestra Elección
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Cocina en Porcelánico
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Cocina en Acero Inoxidable 316
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